El Último libro de Manuel Carballal ¡¡YA A LA VENTA!!

EPIFANÍAS OVNI. CONTACTADOS Y SECTAS UFOLÓGICAS. CUADERNO DE CAMPO 11.

VIMANAS SOBRE LAS PISTAS DE NAZCA


Es evidente que Perú es una pieza clave para comprender la teoría aerostática. En el aeródromo de Nazca me entrevisté con Eduardo Herrán, el piloto descubridor de muchas de las nuevas líneas de Nazca, incluyendo el que bautizó como “hombre con cabeza de buho”, pero al que los astroarqueólogos prefieren denominar: “el astronauta”. 



Eduardo Herrán no solo es un piloto con muchas horas de vuelo, y uno de los descubridores de nuevas líneas en Nazca, sino que además es un experto en vuelo sin motor, uno de los defensores de la alternativa aerostática. Además de las 37 figuras importantes contabilizadas por la Dra. Maria Raiche, Herrán   tiene  contabilizadas 324 nuevas figuras localizadas y fotografiadas por el mismo, durante sus rutas aéreas en los valles de Nazca y Palma.  Y considera que los antigua cultura de Paracas poseía la “tecnología” capaz de construir ingenios voladores para dirigir la elaboración de las famosas “pistas” que  casi sólo pueden verse desde el aire.

La clave de este hipótesis esta en los gigantescos mantos de Paracas, todo un enigma textil y arqueológico. “Los antiguos paracas –explica Herrán- hacían mantos y telas, cubiertas con plumas, de 10 y 12 m. de largo por 4 de ancho, y con ellos se pueden hacer perfectamente campanas de paraceiling  para volar sobre los dibujos”. 

Eduardo Herrán, familiarizado además con el paracaidismo y el parapente, como quien esto escribe, se había percatado de algo en lo que nadie antes había caído. Los antiguos nasca podían haber volado sobre las líneas, sin necesidad de tecnologías mecánicas, y con diferentes sistemas posibles. Aunque sería un aventurero norteamericano quien demostraría experimentalmente que esto es factible…

Maria Reiche ha sido la protagonista absoluta de Nazca durante décadas. Pero en 1975 aparece en esta historia un personaje sorprendente: Jim Woodman, destacado miembro de la “Internacional Explorers Society”. La IES es una asociación privada de investigación con sede en Coral Gables (Florida) y Woodman, uno de sus componentes más audaces, llegó a Perú dispuesto a resolver de una vez por todas el misterio de Nazca. Woodman es un tipo intrépido, y ofreció una interpretación totalmente distinta a algunos elementos de este misterio. ¿Y si los nazca y los paracas utilizaban sus enormes telares con otra intención? ¿y si los hoyos negruzcos que salpican la llanura de Nazca, fuesen restos de hogueras que podrían tener otro uso que el meramente calorífico?. El visionario aventurero vio en aquellos agujeros negruzcos los quemadores destinados a calentar el aire de grandes globos aerostáticos, construidos con los grandes telares de paracas. Casi nada.


Concentrando su interés en las tumbas de los nazca no profanadas por los huaqueros, los colaboradores de la IES encontraron tejidos especialmente ligeros y resistentes, mas livianos e impermeables incluso de los que utilizamos los paracaidistas. 4 de aquellas muestras provenían de sepulturas particulares de Cahuachi, y otros 2 eran tejidos con los que los nazca habían confeccionado vestimentas ceremoniales. Woodman entregó aquellos tejidos para su análisis a la Sioux Falls, la empresa más importante del mundo especializada en la fabricación de aerostatos, con sede en Florida. El resultado de los análisis, firmados por los laboratorios Raven, fueron asombrosos. Mientras que esta empresa, la más moderna del mundo, fabricaba sus aerostatos con materiales textiles de 65 por 35 hebras por centímetro cuadrado, los tejidos de algodón de los nazca eran mucho más densos, con 75 por 40 hebras por centímetro cuadrado e, incluso, en una de las vestimentas ceremoniales, se llegaba a una densidad de 80 por 45 hebras por centímetro cuadrado. En otras palabras, con aquel tejido se podía confeccionar perfectamente un globo aerostático. Ahora había que demostrarlo.

Los dibujos de algunas cerámicas de los nazca terminaron por convencer a los aventureros de la IES de que los antiguos habitantes del desierto peruano habían desarrollado algún tipo de aerostato y se propusieron probarlo experimentalmente. Para ello construyeron un globo de fibra de algodón, de 25 m. de altura por otros 25 de ancho, utilizando solamente materiales indígenas: telares, cuerdas, etc. La forma del globo era tetraédrica, la  más sencilla, que “casualmente” resulta sospechosamente similar a las torres vimanas de los vedas: en este caso una pirámide invertida. Utilizaron las cuerdas, telas, grasas aislantes y demás materiales que estaban al alcance de los antiguos nazca. Así nació el Condor I, y en homenaje a los antiguos nazca el artista Tommy Thomson dibujó en la superficie tetraédrica del globo el mismo cóndor que aparece en las líneas de Nazca.

Con esta hipótesis, tan audaz como factible, el americano ofrecía una alternativa para explicar porque las líneas de Nazca sólo pueden contemplarse totalmente desde el aire. Y al mismo tiempo creaban un vínculo teórico entre Nazca y los relatos sobre hipotéticos aeróstatos descritos, en mi opinión, en otras tradiciones tan alejadas en el espacio y el tiempo como la literatura hindú y sus vimanas. Pero lo bueno que tienen los aventureros, a diferencia de otros especuladores, es que están dispuestos a jugarse el tipo para demostrar sus hipótesis. Es fácil sacarse teorías y conjeturas de la manga. Lo difícil es estar dispuesto a arriesgar la propia vida por comprobarlas. Así que el 23 de noviembre de 1975 la llanura de Nazca fue testigo de un insólito episodio en la historia de la aviación aerostática.

Demostrado, se pudo hacer.

Jim Woodman, que es intrépido pero no imbécil,  escogió como copiloto al británico Julian Nott, un aeronauta experimentado que había batido en el récord mundial de altura a bordo de un aerostato. Además se equiparon con dos paracaídas como medida de precaución. Evidentemente con una campana de apertura rápida, ya que los paracaídas normales, que conozco lo suficientemente bien, no les habrían salvado la vida en esas circunstancias. Y ante los asombrados testigos el “vimana” se elevó, ascendiendo hasta 130 metros de altura. Aunque el aterrizaje fue un poco más brusco de lo previsto, lo que a mi juicio da más valor a la audacia de Woodman, el globo de los nazca voló. 

Las fotos que tomaron durante su ascensión Nott y Woodman, tal vez representan exactamente lo mismo que vieron los arquitectos que diseñaron los dibujos de Nazca. O tal vez no. Es imposible saber, al menos por el momento, si nos nazca, u otras civilizaciones del pasado, utilizaron globos aerostáticos. Pero lo que si demostraron Nott y Woodman, es que pudieron haberlo hecho. Y creo que es mucho más razonable, de acuerdo a la “navaja de Ocaam” plantearse la hipótesis aerostática que la extraterrestre. Incluso la hipótesis del paraceiling que me adelantaba el piloto de aerocondor. Al fin y al cabo las modernas alas delta del vuelo sin motor fueron ya diseñadas, hace cinco siglos, por Leonardo Da Vinci.

Después de la exhibición de Nazca, en 1975, el globo piramidal de Nazca volvió a surcar los cielos en muchas ocasiones. Adaptado ya a las nuevas tecnologías aerostáticas, esto es, con una cómoda barquilla, quemadores y mandos modernos, y nuevos materiales en la envoltura, su particular forma de pirámide invertida fue el centro de atención en festivales internacionales de aeróstatos como los de Alburquerque, Lancaster, New York, Muncie, Jackson, etc, en 2004 y 2005. Y presumo que continuará viéndose en los próximos años.

No existe ninguna imposibilidad técnica o física para que los antiguos nazca hubiesen podido volar. Lo único que habrían necesitado es haber contado con un Herón de Alejandría, con un Imhotep, con un da Vinci o simplemente con un padre Padre Bartolomeu propio, que se hubiese percatado alguna noche, al calor del fuego, de que el aire caliente asciende. 

¿Es absurdo pensar que la cultura que construyó Machu Pichu, que realizó operaciones de trepanación con éxito, y que creó las líneas de Nazca pudiese contar con un observador tan perspicaz? Yo no lo se. Tal vez sea todo mucho más sencillo, y pueda resumirse en una anécdota que me relato mi colega, el piloto de aerocondor: 

“Una vez estaba dando una conferencia en México, en la UNAM y una niña, Mª Paz, de 12 años, me dio una respuesta que nunca se nos había ocurrido. Me dijo, Dr., los antiguos nazca no tenían que ver las líneas cuando estaban vivos, sino que cuando morían, y su espíritu subía al cielo, es cuando veían lo que habían hecho…”. 

Maria Reiche, la dama de Nazca, falleció el 6 de junio de 1998. Tal vez ella tenga ya las respuestas que otros continuamos buscando por todo el planeta…

Las tecnologías secretas

Muy lejos de la peyorativa imagen de ignorantes supersticiosos, nuestros antiguos fueron capaces de desarrollar ingeniosos elementos científicos en todas las culturas y en todas las épocas del pasado. Algunos autores prefieren atribuir a civilizaciones no humanas los extraordinarios descubrimientos científicos realizados por los sabios y pensadores del pasado, sin embargo, quienes hemos tenido la fortuna de convivir con los nómadas del Sahara o el Gobi, con los médicos tradicionales de centro Africa o Sudamérica, o con los descendientes de los constructores de Machu Pichu, la Gran Pirámide, o los templos vimana, podemos dar fe de los conocimientos químicos, arquitectónicos, astronómicos y físicos de los llamados “pueblos primitivos”, todavía en la actualidad. La terrible desaparición de los grandes archivos del pasado, como la Biblioteca de Cartago, en Túnez, o la Biblioteca de Alejandría, en Egipto, nos ha privado de millones de documentos, libros y mapas que reflejaban los descubrimientos de científicos, filósofos y pensadores de la antigüedad, de los que sólo se conservan referencias en los textos que han sobrevivido.

Por ejemplo, sabemos que el genial Imhotep, además de astrónomo, químico, médico y filósofo, fue el autor de eruditos estudios científicos para el faraón Zoser, aunque solo haya pasado a la historia por ser el arquitecto que “inventó” las pirámides. Aún más sorprendentes son los inventos de Herón de Alejandría, el primer científico que ideó androides, los predecesores de nuestros robots, así como una máquina de vapor, utilizando hábilmente la presión del agua hervida, etc. Sus libros “Autómatas” y “Pneumática” fueron, quizás, los primeros tratados informáticos de la historia, devorados por las llamas en el incendio de la Biblioteca de Alejandría. Al igual que Leonardo da Vinci ideó sofisticados ingénios de aplicación mecánica, y hasta diseños de naves voladoras, otros científicos, filósofos y pensadores, aún más antiguos, diseñaron inventos no menos geniales. Herón de Alejandría, Imhotep, Arquímedes, etc. 

Pero no sólo se trata de teorías. Existen pruebas físicas de la habilidad tecnológica de nuestros menospreciados antiguos. Objetos como la “maquina de Antiquitera”, un auténtico ordenador astronómico del pasado; o las “pilas” de Bagdad, un ingenioso sistema de galvanización y no otra cosa, demuestran que no solo los científicos del pasado podían revolucionar las matemáticas, la química o la física de su época con su imaginación… sino que algunos plasmaron físicamente aquellas revolucionarias ideas científicas. Volar fue una de ellas.



Comentarios

INVESTIGACIÓN PSY: UNA HISTORIA DE LA PARAPSICOLOGÍA CIENTÍFICA Y UNIVERSITARIA EN ESPAÑA.

INVESTIGACIÓN PSY: UNA HISTORIA DE LA PARAPSICOLOGÍA CIENTÍFICA Y UNIVERSITARIA EN ESPAÑA.
COMPRA YA EL NUEVO CUADERNO DE CAMPO DE MANUEL CARBALLAL PINCHANDO EN LA IMAGEN.

D. OSCAR REY BREA "EL GALLEGO SABIO"

D. OSCAR REY BREA "EL GALLEGO SABIO"
HOMENAJE DE MANUEL CARBALLAL EN EL 1º CENTENARIO DE SU NACIMIENTO

EL GALLEGO SABIO. Oscar Rey Brea. El Hombre que descubrió los OVNIS.

EL GALLEGO SABIO. Oscar Rey Brea. El Hombre que descubrió los OVNIS.
Comprar Libro.

UAPs: EL SECRETO. Historia de la aeronáutica no convencional.

UAPs: EL SECRETO. Historia de la aeronáutica no convencional.
Comprar Libro

LA VIDA SECRETA DE CARLOS CASTANEDA

LA VIDA SECRETA DE CARLOS CASTANEDA
Comprar Libro

CUADERNO DE CAMPO Nº 9. MEIGAS: LAS BRUJAS SABIAS

CUADERNO DE CAMPO Nº 9. MEIGAS: LAS BRUJAS SABIAS
Comprar libro

CUADERNO DE CAMPO Nº 8. EXTRATERRESTRES EN LA ANTIGÜEDAD... O NO.

CUADERNO DE CAMPO Nº 8.  EXTRATERRESTRES EN LA ANTIGÜEDAD... O NO.
Comprar Libro

REVISTA EL OJO CRÍTICO

REVISTA EL OJO CRÍTICO
Descarga Gratuita


Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

CONTACTO

CONTACTO